EL NOBEL, Y OTROS REFERENTES, DEFENDIERON AL EX ARZOBISPO
Pérez Esquivel: "No hay ningún vínculo entre Bergoglio y la dictadura"
15-03-13
La sorpresiva elección de Jorge Bergoglio como Papa
generó repercusiones del espectro político y tanto el oficialismo como
la oposición opinaron acerca de la histórica designación de Francisco al
frente de la Iglesia.
Pero también lo hicieron referentes de diferentes
ámbitos, como el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, quien
desligó al Papa de toda relación con la dictadura militar frente a las
críticas.
No hay ningún vínculo que relacione a Bergoglio con la dictadura
militar, aseguró Pérez Esquivel en declaraciones a BBC Mundo y radio La
Red.
El Nobel en 1980 agregó que hubo obispos que fueron cómplices de
la dictadura, pero Bergoglio no. Sin embargo, consideró que el ex
arzobispo de Buenos Aires tal vez no tuvo el coraje o la presencia de
reclamar con mayor fuerza por los detenidos y desaparecidos a manos de
las Fuerzas Armadas.
Pérez Esquivel profundizó: A Bergoglio se lo
cuestiona porque se dice que no hizo lo necesario para sacar de la
prisión a dos sacerdotes, siendo él el superior de la congregación de
los Jesuitas, pero yo sé que muchos obispos pedían a la Junta la
liberación de prisioneros y sacerdotes y no se les concedía.
La ex jueza Alicia Oliveira fue otra de las personalidades que
respaldó al nuevo Papa. Las acusaciones no son ciertas, sé la cantidad
de gente que sacó del país, sé la cantidad que ayudó, es muy digno y
respetable. Lo que están diciendo es una infamia, sostuvo.
En defensa de
Francisco también habló el diputado kirchnerista Jorge Chino Navarro,
que calificó de positiva su designación. Pese a admitir diferencias
entre el Papa y el Gobierno, también rechazó todo nexo de Bergoglio con
la dictadura. Me quedo con la opinión de Pérez Esquivel y de Alicia de
Oliveira, que son personas intachables que dicen que Bergoglio tuvo una
actitud durante la dictadura que dista de lo que se lo acusa, comentó
el legislador.
Otro dirigente kirchnerista que hizo mención al nuevo Papa fue el
vicegobernador bonaerense Gabriel Mariotto, que lo definió como un Papa
peronista y advirtió que referentes opositores se regodean pensando
que ahora van a tener la posibilidad de conformar una fuerza política
que sea una alternativa cuando, en realidad, sucederá todo lo
contrario.
De la oposición se destacó el punto de vista de Francisco De
Narváez, diputado nacional de Unión Celeste y Blanco, que declaró estar
muy feliz y emocionado, aunque advirtió que el kirchnerismo duro
siente un enorme rechazo por la figura de Bergoglio.
También habló la ex ministra de Desarrollo Graciela Fernández
Meijide, quien recordó que durante su gestión en la Alianza encontró en
Bergoglio a una cabeza muy abierta y a un hombre dispuesto a escuchar
y alimentar su propio conocimiento; muy tolerante. Me parece muy
extraño que en el entorno del gobierno estén preocupados por
ningunearlo, añadió la ex dirigente.
Entre los representantes de la Iglesia sobresalieron las opiniones de
la monja Marta Pelloni, quien recordó que Bergoglio la acompañó en
momentos difíciles y del administrador apostólico de la Diócesis
Merlo-Moreno, Jorge Casaretto, quien resaltó la figura del Papa
Francisco y negó que haya tenido participación en la dictadura.
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