Por Brenda Hoffman
20 de Julio 2015
Muchos
hablan de aterrizajes de seres del espacio exterior prontos a suceder,
y que alienígenas espaciales se mueven rápidamente alrededor de la
tierra esperando que ustedes terrícolas les permitan volverse visibles.
Mientras es verdad que
seres de muchos lugares están observando la tierra y sus organismos,
los seres que no son de la tierra no tienen necesidad de naves
espaciales. Creer que los alienígenas espaciales van a aterrizar en la
tierra es un poco como esperar que un caballero medieval en un caballo
blanco encuentre el camino a tu corazón.
Esto
no quiere decir que quienes desean creer que alienígenas espaciales
llegarán en naves espaciales estén equivocados, sino simplemente mal
orientados sobre las capacidades de los seres de otras dimensiones.
Ustedes,
habitantes de la tierra, pensaron una vez que las computadoras, la
televisión, los radios y los aeroplanos estaban más allá de lo posible
de creer. Actualmente, esos inventos y muchos otros son parte de su
vida cotidiana.
Sin embargo, ustedes continúan creyendo que los seres
de otras dimensiones y frecuencias requieren elementos de su vida
actual que ustedes comprenden. Esto no es así.
Así
como ustedes están empezando a creer que les es posible visitar otras
dimensiones, tiempos y frecuencias sin la necesidad de un vehículo
físico; de igual manera, quienes no son terrestres no requieren una
nave espacial u otro vehículo.
Mucha
gente de la tierra una vez creyó en que el infierno y el diablo eran
parte de su temerosa vida y de su muerte. Por supuesto esto no es así y
nunca lo ha sido. Fue simplemente una creación humana de miedo.
Entonces, las naves espaciales no son más reales que el infierno y el diablo; o el cielo, en ese sentido.
Ustedes
ahora son capaces de crear lo que deseen, de igual manera en que esto
es así para aquellos quienes han fallecido o trascendido de esta tierra
recientemente.
Muchos de ustedes están familiarizados con el concepto
de que quienes sienten que necesitan residir en el infierno, el
purgatorio o cualquier otro lugar que creen van a ocupar luego de la
muerte; lo creen hasta que comprenden que ellos pueden re-crear la
llamada vida después de la muerte más apropiada para su ser.
Aunque
aquellos de ustedes que esperan que las naves espaciales sean
declaradas válidas por el presidente de los Estados Unidos o cualquier
otra persona que ustedes sientan que puede validar sus reclamos, tal
declaración no será una realidad para quienes no lo creen. Ese
escenario será su creación, no un acontecimiento global.
Esto
no es para burlarse de sus creaciones, sino para informarles que tal
creación localizada, dedicada a lo que fue en vez de a lo que es, es
una creación pequeña, no grande a la que los seres que los observan,
incluso nosotros, esperan que ustedes se orienten.
¿Realmente
importa si las naves espaciales aterrizarán? ¿Sus vidas van a ser tan
diferentes si alguien, a quien ustedes le han dado poder, declara que
sus creencias son válidas? No y no.
Ustedes
poseen habilidades mucho más grandes de las que ustedes les han dado o
darán a las naves espaciales. Muchos de ustedes declararán estas
afirmaciones como incorrectas, erróneas o simplemente mal
intencionadas.
Pero estas afirmaciones son para abrir sus creencias y
habilidades de creación más allá de su necesidad de que otros validen
su ser, ya sean naves espaciales u otras piezas de poder dirigidas
desde el exterior.
Por
eones, ustedes han creído en un Dios sin ninguna verificación física de
que tal ser exista. Pero, ahora que sus creencias se están abriendo a
pensar en ustedes como una parte de Dios, ustedes demandan una
verificación.
La
verificación está en su interior. A medida que suelten las creencias de
que necesitan de alguien o algo externo a ustedes: alienígenas
espaciales, Dios, gurús, líderes corporativos, políticos o cualquiera
que no sean ustedes mismos, sabrán que ustedes pueden crear cualquier
cosa con su nuevo ser diamante multifacético.
Ustedes
no están limitados a lo que otros les provean, ustedes nos están
limitados a aquellos con poder en su vida diaria. Ustedes no tienen
limitaciones.
Esperar que los alienígenas espaciales verifiquen su ser y
sus creencias es entregar su poder igual que lo hicieron en su mundo
3D con los gurús, líderes religiosos, y figuras deportivas,
corporativas y políticas.
Nadie
es más poderoso ni más sabio que ustedes mismos. Nadie va a
rescatarlos, verificarlos, entrenarlos o quererlos de manera más
competente que ustedes mismos.
Incluso
si sus sueños de naves espaciales fueran realidad, esos seres de las
naves espaciales no los entenderían, conocerían o dirigirían mejor de
lo que ustedes se dirigen a sí mismos.
Permítanse conocer y aceptar sus
poderes sin necesidad de que otros los rescaten o los verifiquen.
Ustedes son todo lo necesitan para convertirse en una totalidad y no
ser más un mero segmento de dos.
Si
ustedes tienen las habilidades para crear dimensiones y frecuencias, y
cambiar su historia, ¿por qué necesitarían una nave espacial para
viajar?
Lo mismo sucede
para aquellos que ustedes creen que nos visitan de otros planetas,
Ustedes son ustedes en toda su gloria. Ellos son iguales. Observando,
enviando amor y tal vez, visitando lugares a través de las dimensiones.
Pero, ciertamente no rodeando la tierra en una nave espacial anticuada
esperando el permiso de alguien a quien ustedes en la tierra le hayan
dado poder. Así sea. Amén.
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Traducción: Guadalupe Rodríguez
Difusión: El Manantial del Caduceo
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