Benjamin Fulford: ¿Están las potencias occidentales tratando de iniciar la guerra en Asia para distraer la atención de su conquista de territorios del Sahara?
21 enero, 2013
Es difícil para muchos de nosotros, gente consciente, darse
cuenta de que muchas personas todavía se creen los cuentos de los
diarios sionistas que etiquetan “Al CIAda” como un movimiento islámico.
Estos días, sin embargo, incluso los esclavos con lavado de
cerebro que obtienen su información de periódicos denominados “Jew York
Times ” debe estar sufriendo de disonancia cognitiva cuando leen que
Occidente está apoyando a “Al CIAda” en Siria y Libia pero luchando
contra ellos en Malí y Argelia.
Lo que realmente está sucediendo es una conquista de territorio en el
Sahara dirigido a tener control occidental de los recién descubiertos
yacimientos de petróleo, uranio, oro y otros recursos en el vasto pero
casi vacío Sahara.
Esta conquista de territorio también puede orientarse
a apropiarse de lo que se convertirá en una opción inmobiliaria si la
Tecnología suprimida de Energía se utiliza para iniciar proyectos de
desalinización masiva de agua de mar para reforestar los desiertos.
Al mismo tiempo, las potencias occidentales están haciendo todo lo
que pueden para distraer a Asia de este tema, avivando sentimientos
patrioteros sobre algunas islas pequeñas. Las pequeñas islas no son más
que un gusano en un gancho y el nuevo régimen chino parece estar picando
en esta estafa tragándose anzuelo, sedal y plomada.
También la semana pasada hubo informes que el Shah volvería a Irán,
que China tendrá una emperatriz y que ha habido un golpe de estado en la
casa imperial japonesa.
Los informes sobre el Shah y la emperatriz provienen ambos de una
fuente de la CIA y han sido confirmados parcialmente por otras fuentes.
Concretamente, el Shah de Irán, Mohammad Reza Pahlavi, no murió de
cáncer poco después de ser expulsado del poder, sino que fue puesto en
el programa de protección de testigos del FBI.
El Shah, que ahora
tendría 93 años (si los informes son correctos) y su hijo de 52 años de
edad, Reza Ciro Pahlavi, han movilizado a la antigua sociedad secreta
del Dragón Verde persa para preparar su regreso, según la fuente de la
CIA.
Esto encaja con otros signos constantes de una movilización
generalizada musulmana con apoyo tácito de Estados Unidos.
En Egipto,
por ejemplo, el Presidente Mohamed Morsi de la Hermandad musulmana no
ganó las elecciones, pero le fue dado el trabajo de Presidente ante la
insistencia del Pentágono, según un experto senior en Oriente Medio del
gobierno japonés que acaba de regresar de un viaje para “descubrimir los
hechos” por la región.
Esto corrobora lo que todas las fuentes en el
BIS, la CIA, MI5 y el Vaticano dicen: que hay un movimiento para
restablecer el califato y crear un super Estado musulmán.
También, cabe señalar que la planta petrolífera de los rehenes en el centro de la crisis en Argelia parece contener varios estanques de retención de agua gigante y puede haber estado participado en experimentos de desalinización y reforestación del desierto.
También,
está claro que muy pocos de los atacantes en ese incidente fueron
argelinos. En cambio, parece ser elementos del mismo ejército mercenario
occidental que atacó Libia y derrocó al Coronel Gaddafi. Uno de los
principales objetivos de derrocar a Gaddafi fue apropiarse de sus
grandes proyectos para reforestar los desiertos.
Eso nos lleva a la intervención militar de Francia y Estados Unidos
en Mali. Aunque la conquista de Mali es ciertamente parte de una
apropiación del desierto mayor por parte de Occidente, también puede
haber un interés muy específico para Francia y EEUU para invadir ese
país en este momento: oro.
La semana pasada el banco central alemán pidió a la Junta de la
Reserva Federal que devolviese 300 toneladas y al Banco Central francés
que devolviese 374 toneladas de oro. Ambos contestaron que tendrían que
pasar 7 años para devolverlas.
Dado que la producción de oro de Malí es
de 85 toneladas al año (según las estadísticas de 2006), con 7 años de
producción de oro de Malí sería casi exactamente lo suficiente como para
pagar la deuda de oro de Francia a Alemania y la cantidad solicitada a
la Fed.
La solicitud alemana de repatriación del oro viene después de que se
encontraran barras de oro revestido de tungsteno en el Banco Central
alemán, según una fuente del MI5.
Esto significa que los alemanes se han
sumado a los bancos centrales británicos y chinos como víctimas del
fraude de tungsteno procedentes, al parecer, de la Junta de la Reserva
Federal durante los años de que Bill Clinton estaba en el poder, dice la
fuente del MI5.
Si empiezas a leer sobre algún tipo de “crisis” en Ghana durante los
próximos meses, puedes estar bastante seguro de que la Reserva Federal
está involucrada y que está conectado a la producción de oro de 100
toneladas al año de oro de esos países.
Mientras, en Asia, el hogar del 85% de las reservas históricas de oro
del mundo, los movimientos continúan tratando de inyectar este oro en
el sistema financiero internacional. Para ello, los asiáticos están
procediendo con acciones legales para forzar a la Fed y al Banco Central
europeo para que devuelvan el oro asiático prestado en los años 30.
Aquí es donde entra en juego el tema de una emperatriz que regresa a
China. Los derechos de la mayoría del oro asiático legalmente pertenecen
a la dinastía Qing y para hacer valer esos derechos los chinos
permitieron que una Emperatriz de la dinastía Qing volviese a China en
febrero del año pasado, según una fuente de la CIA.
Una fuente del FBI
también mencionó a una emperatriz China. Fuentes chinas también
reconocen esto pero se ponen claramente nerviosos cuando se saca el
tema, es decir, que se supone que se mantienen en secreto.
En Japón también, la familia Imperial ha comenzado a reafirmar sus
derechos históricos en la distribución de yenes. Se dice que la
emperatriz Michiko y su segundo hijo, el Príncipe Akishino son los
miembros más asertivos de la familia real en este punto.
Esto es lo que
está detrás de la agresiva impresión de yenes del primer ministro Shinzo
Abe, según un miembro de un grupo de la derecha japonesa. Si esto es
cierto, entonces son más malas noticias para la Junta de la Reserva
Federal y los sionistas, que se habían hecho con los derechos sobre el
yen.
Desde la perspectiva de la Junta de la Reserva Federal y los sabios
de Sión que la controlan, la mejor forma de salir de este lío sería
iniciar una guerra en Asia. Por esta razón han tratando arduamente de
provocar una guerra entre China y Japón sobre algunas pequeñas islas en
disputa.
Una fuente del gobierno comunista chino con enlaces en el Politburó
dice que hay un empuje por parte de los halcones en el Gobierno para
tener una guerra breve y abrupta en la frontera con Japón, similar a las
que han tenido con la India, Rusia y Vietnam desde su llegada al poder.
Quieren usar una guerra por las Islas disputadas, Senkaku/Daiyu, como
un primer paso para apoderarse de todo el archipiélago de Okinawa, dice
la fuente.
Los halcones japoneses, por su parte, piensan que pueden aniquilar a
la Armada China y a su fuerza aérea en 3 días y quieren una oportunidad
de hacer precisamente eso. De lo que los halcones japoneses no se dan
cuenta es que en una pelea así, Taiwán, con su moderna fuerza aérea y
armada, lucharía del lado chino.
En el momento de escribir este artículo
alguien había hackeado Google Earth y había puesto una bandera gigante
taiwánesa (nacionalista China) en la mayor de las islas en disputa.
De lo que las cabezas calientes de ambos lados necesitan darse cuenta
es de que están en peligro de caer en una trampa sionista muy
hábilmente puesta que daría como resultado (no importa quien gane) la
destrucción de la unidad asiática emergente.
El otro asunto que está pasando en Asia es que Myanmar está siendo
configurada como un reemplazo para Corea del Norte en tanto que la mayor
base de producción de drogas en Asia, según una fuente en la facción de
tratamiento de drogas de la CIA.
Lo que los asiáticos necesitan hacer es reflexionar sobre las pasadas
acciones asesinas de los sionistas en Asia y sacarlos a patadas en el
culo de toda la región.
Para evitar mayores problemas de fabricación
occidental, también necesitan establecer una agencia de planificación
económica internacional para financiar una transición de espadas a
arados del complejo industrial militar.
Por Benjamin Fulford.
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