BRICS: por un sistema de relaciones económicas más justo
Entrevista de Vladímir Putin a ITAR-TASS.
—El BRICS es un fenómeno reciente que ha
despertado una especial atención, especialmente en las condiciones de
crisis de la economía mundial general, por los pronósticos optimistas
respecto a su desarrollo.
¿Cuál es la importancia actual del BRICS para
Rusia y qué representará para ella en el futuro? ¿Hasta qué punto
resulta cómodo este formato de relaciones entre estos países?
—Una
serie de factores de largo plazo inciden en el éxito del BRICS. Las
economías de Brasil, la India, China, Sudáfrica y Rusia desde hace dos
décadas se proyectan como las líderes del crecimiento económico mundial.
Así, en 2012, los ritmos promedios de crecimiento del PIB alcanzaron el
4 %.
Para los países del septeto financiero este índice es de 0,7 %. En
tanto el PIB de los países del BRICS, calculado en relación a la
capacidad adquisitiva de sus divisas nacionales, supera en la actualidad
el 27 % característico para el resto del mundo, y esta fracción aumenta
constantemente.
El BRICS es uno de los
elementos claves del mundo multipolar que se está gestando. Los
participantes del quinteto confirman sin falta sus compromisos con los
principios básicos del derecho internacional, colaboran con el
fortalecimiento del papel rector de la ONU.
Nuestros países no aprueban
las políticas de fuerza e irrespeto a la soberanía de otros países.
Tenemos semejantes puntos de vista respecto a problemas internacionales
actuales, entre ellos la crisis siria, la situación en torno a Irán, la
solución de los conflictos del Oriente Medio.
Los
miembros del BRICS se expresan por la creación de un sistema de
relaciones económicas mundiales más balanceado y justo. Los Estados con
mercados en formación están interesados en garantizar un crecimiento a
largo plazo, y estable de la economía global, la reforma de la
estructura financiera económica y el incremento de su efectividad.
La
decisión consolidada de participar en la realización del crédito del FMI
con setenta y cinco millardos de dólares, medida que condujo al aumento
de la fracción de las economías en rápido desarrollo en el capital del
Fondo, es testimonio de esta voluntad.
Rusia,
como fundadora del BRICS y presidente de su primera cumbre
(Ekaterimburgo, 2009) considera las labores de unificación como una de
las prioridades de nuestra política exterior. En este año aprobé el
Concepto de Participación de Rusia en el BRICS, documento que define las
tareas estratégicas que debemos resolver al desarrollar el intercambio
con nuestros aliados de Brasil, la India, China y Sudáfrica.
Esta
cooperación en los asuntos de orden internacional, el comercio, el
intercambio de capitales, las causas humanitarias, permite crear unas
condiciones externas extremadamente favorables para el ulterior
crecimiento de la economía rusa, la mejoría del clima inversionista, el
aumento de la calidad de vida y el bienestar de los ciudadanos de
nuestro país.
La participación en esta Unión propicia el fortalecimiento
de relaciones bilaterales privilegiadas con los Estados del BRICS,
basadas en los principios de coexistencia pacífica y cooperación
equitativa. Dedicamos un interés especial al incremento de la presencia
rusa tanto lingüística como cultural e informativa en los países
asociados al BRICS, una ampliación de los intercambios docentes y los
contactos entre las personas.
—¿Cuáles son
las principales tareas de la unión en lo inmediato? ¿Existe una visión
de las directrices estratégicas del desarrollo económico del BRICS?
—El BRICS
define su trabajo sobre la base de Planes de acción, aprobados en las
cumbres anuales. El plan pasado, aprobado en Delhi, definió diecisiete
direcciones de intercambio. Entre ellas, los encuentros de los
cancilleres en los predios de la Asamblea General de la ONU, reuniones
conjuntas de los ministros de Finanzas y directivos de los bancos
centrales en el marco de las reuniones del G-20, el Banco Mundial, el
FMI, así como contactos en el marco de otros eventos.
Rusia
otorga gran importancia al desarrollo de las relaciones comerciales e
inversionistas con sus socios del BRICS, a la creación de nuevos
proyectos de negocios multipolares con la participación de las
comunidades empresariales de nuestros países.
Esa es la función del
Consejo Ejecutivo del BRICS, institución que planeamos presentar
oficialmente en Durban. En vísperas de la Cumbre también se celebrará un
Foro de Negocios del BRICS, en el que participarán más de novecientos
representantes de las comunidades empresariales de nuestros países.
—Las
potencialidades de los países del BRICS ponen a la orden del día la
necesidad de no solo garantizar la coordinación de sus políticas
económicas, sino de llevar a cabo una estrecha interrelación de carácter
geopolítico.
¿Cuál es el papel geopolítico, cuál es la misión de los
países del BRICS en el mundo contemporáneo? ¿Se restringe a temas
económicos o puede asumir mayores responsabilidades en los procesos
geopolíticos? ¿Cómo implementan sus políticas en relación al resto del
mundo, incluidos sus principales actores, tales como EEUU, la UE, Japón?
¿Cuál es la visión conceptual del futuro de la unión?
—Los
países del BRICS aspiran, ante todo, a colaborar con el establecimiento
de una economía mundial más estable, con un crecimiento autosostenible,
así como reformar las estructuras financieras y económicas.
Lo más
importante para nosotros es hallar soluciones que permitan acelerar el
desarrollo global, estimular el flujo de los capitales a los sectores
reales de la economía, aumentar la ocupación laboral. Esto resulta
especialmente importante si consideramos el bajo dinamismo de la
economía mundial en la que se mantiene un alto nivel de desempleo, hecho
que es inaceptable.
Aunque estos fenómenos ahora son característicos en
primera instancia para los países de Occidente, esta influencia
negativa afecta también a los países del BRICS, disminuyen los mercados
de exportación, se mantiene la inestabilidad en las finanzas mundiales,
se frenan nuestros ritmos de crecimiento económico.
A
su vez, proponemos a nuestros socios ir transformando paulatinamente el
BRICS de un foro de diálogos que coordina nuestras posturas respecto a
un grupo restringido de asuntos, en un mecanismo complejo de interacción
estratégica. Un mecanismo que permita buscar soluciones conjuntas a los
problemas clave de la política mundial.
El
BRICS tradicionalmente se proyecta desde posiciones semejantes respecto a
la solución de los conflictos internacionales por medios de la
diplomacia política. Estamos preparando una declaración conjunta para la
Cumbre de Durban donde expresamos detalladamente nuestros principios
respecto a temas tan actuales como la crisis de Siria, Afganistán, Irán y
los problemas del Oriente Medio.
No vemos al
BRICS como un competidor geopolítico contra los Estados occidentales o
sus instituciones. Por el contrario, estamos abiertos al debate con
aquellos que estén interesados, siempre en el marco de un modelo mundial
multipolar.
fs/as
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