El Plenilunio de Géminis, Festival del Cristo y de la Humanidad, nos envuelve desde el día 2 de junio
hasta el vecino Tránsito de Venus el día 6, en una universal corriente
de Sabiduria y Amor de altísima frecuencia, que producidará en toda la
humanidad, especialmente en aquellos que estan manifestando con rapidez
talentos y destellos de divinidad, una aceleración muy importante, en la
concreción y materialización de esas cualidades, que armonicamente
enfocadas y dirigidas por el poder mental, gestan en el mundo astral los
cimientos de una Nueva Tierra.
Géminis signo de aire, empuja con velocidad la emergente quinta
esencia humana, y junto a su regente esotérico Venus (Amor-Sabiduria)
crean un fuerte vórtice magnético que nos permite una re-unificación de
los polos opuestos, para dirigirlos y coordinarlos, haciendo emerger un
nuevo y elevado nivel de conciencia y percepción.
El sol en conjunción con Venus (altamente vinculado a la Luz
Crística: “Yo soy la brillante estrella matutina” dijo Cristo, y así es
como ha sido conocido Venus a lo largo de las edades de los hombres),
desarrolla un nuevo estado del Ser, donde empezamos no ya sólo a conocer
si no a manifestar las compesanciones energéticas que dan lugar a la
exteriorización de nuestro Yo Superior, quien no está limitado por los
procesos de separación y dualidad de la personalidad.
“Reconozco mi otro yo, y al menguar éste, YO SOY, resplandezco y crezco”.
Esta es la nota clave de Géminis donde la aceptación y la sanación
amorosa de la energia Crística de este signo nos permiten generar
cambios substanciales en nuestras fuerzas, convocando en nuestro
interior un nivel superior de conciencia desde donde empieza a funcionar
ritmica y armónicamente el Gran Todo Unificado que encarnamos.
Este gran centro de fuerza nacido del esfuerzo y la reorientación
para reconocer cada estado y nivel de nuestra esencia como una corriente
única de manifestación, empieza a radiar su hipermagnetismo sobre la
búsqueda personal, sobre las corrientes astrales del Logos Planetario y
es capaz de asentar los puentes y sendas que nos situan de forma
permanente en un estado de comunicación telepática con las fuerzas de
Luz y Jerarquias que co-crean con la humanidad esta senda de gloriosa
Ascensión.
Entre los muchos niveles del camino del conocimiento que estamos
transitando y cuyos velos vamos dejando caer lentamente, tal vez muchos
sintamos las cuadraturas de Júpiter y Neptuno y Urano y Plutón
removiendo los aspectos a sanar.
La conujunción de Neptuno (disolviendo fronteras) y Quirón (el
centauro que cura las heridas del mundo) generará un inspirador y
receptivo estado de conciencia universal que coordinará los pasos
insuflando una belleza trascendente que influenciará la mente
encontrando y liberando los recursos potencialmente creativos que
residen en nuestro interior, que permitirán un proceso de evolución y
despertar que generarán un realineamiento con la recién estrenada quinta
esencia de nuestro Ser.
Urano viajando más allá de los límites de pensamiento nos desbordará
de visiones y Plutón con su fuerza de Voluntad y Poder destruirá todo lo
limitante alejando de nuestra búsqueda la tentación del fanatismo
religioso o la peligrosa atracción hacia el mundo del psiquismo
inferior.
Así que independientemente de las bases de creencias que hayamos
estado generando durante este tránsito de búsqueda personal Urano
transformará y reestructurará y Plutón propiciará un renacimiento del
conocimiento atesoraro durante este tiempo regenerándolo con su gran
influencia sobre las masas y quebrando cueste lo que cueste, todo
aquello que se encuentra en el arco involutivo de nuestra percepción.
Mercurio, fuerza estelar capaz de interpretar y transmitir a los
niveles concretos estas corrientes sujestivas en conjunción con Venus y
su poder atrayente, juegan un vital papel durante este periodo de salto
personal hacia la sabiduria, revelándonos lentamente como nuestro
servicio e iluminación nos estan convirtiendo en un privilegiado
instrumento desde donde la luz de las grandes inteligencias se recibe y
se percibe.
Saturno,
fuerza estelar por excelencia que conduce a la humanidad en la senda
del discipulado se coordina con Venus y su convocador amor produciendo
un apacible y armónico equilibrio emocional que desvelan la alquimia del
viaje transformador del sentimiento al Amor Universal.
Junto a Júpiter en los cielos de estos días Saturno (Ángel Solar
repartidor de la Inteligencia Activa) derrama su protectora influencia
generando un empuje hacia la síntesis del mundo emocional y la razón,
propiciando la materialización de las palabras de Buddha: “El Amor nace
por medio de la mente”.
Saturno y su trígono a Mercurio participan en este motor generador de
la transmutación del conocimiento a la sabiduria llenándonos de la alta
sensibilidad necesaria para re-difundir y reenfocar todos los
planteamientos hacia el fin natural de Géminis, que no es otro que
convocar y fusionar las visiones mísiticas en un profundo conocimiento
oculto de la realidad que transitamos, y que nos permite ya elevarnos y
declarar nuestra posición de generadores necesarios de las causas de un
nuevo y resplandeciente mañana.
Es pues este plenilunio de Géminis, altamente potencializado por el
eclipse lunar parcial, el vecino tránsito de Venus y el descenso a la
puerta de los hombres durante el solsticio un gran vórtice de conexión
Jerárquica, donde a través del servicio en este Festival de la
Humanidad, se nos convoca para hacer concretos y reales los principios
del mundo dévico solar.
Nuestros vehículos inferiores son puestos a prueba por el eclipse
encontrando aquellos factores o resistencias pasadas que impiden la
total receptividad en la impresión de los delineamientos futuros del Yo
superior, y esta será la tónica dominante durante la tríada energética
junio-julio-agosto, donde seremos reunidos una y otra vez hasta poder
asentar y declarar con firmeza que hemos realizado el proceso alquímico
humano que nos permita anunciar a las fuerzas Jerárquicas desde el
plenilunio de Leo: “Yo soy Ese, Ese, soy YO”.
El poderoso encuentro dévico-humano de este plenilunio, englobado en
la enaltecedora corriente de la Esencia Humana de este mes de junio, nos
debe conducir a la experimentación del servicio más puro y
desinteresado, donde podemos percibir que es a través de la iluminación a
otros que nuestra luz Crística se revela y materializa generando la
propia sacralización de nuestra forma.
Es a través del privilegiado cumplimiento de nuestra tarea como
iluminadores y generados de puentes de luz, que conseguiremos durante el
solsticio invernal el 21-12-12 mantener permanentemente abierta la
“puerta de los Dioses”, que conducirá a gran parte de la humanidad a
abandonar el tránsito y la influencia de la rueda zoodiacal inferior,
para ponerse al servicio de la nueva senda de las fuerzas superiores, o
rueda zoodiacal mayor.
Un profundo y místico acercamiento a nuestro yo interno, radiado
posteriormente en servicio a todos aquellos que todavia necesitan de una
gran inspiración para despertar a la divinidad emanente de su ser, será
la fuerza más poderosa y transformadora de estos días.
Recitar la Gran Invocación, nos reune en un estado superior donde
Jerarquias y fuerzas solares se unifican sin límites, generando un
esperanzador principio de fuerza, donde la nueva raza y la nueva tierra,
empiezan a manifestar la rítmica ascensión al 5º reino.
Anabel.C.Huertas
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