Dios
que es tu máxima meta anda por la calle, quiere comunicarte su Amor,
quiere crear contigo. Observa las diferentes estrellas presentes en los
seres que tienes cerca de ti. Y debes estar atento a no dejar que
destruyan la vida aquellas que han apagado su luz.
Eres
un Ser, una Chispa Divina, todos los seres de la Tierra y del Universo
son chispas divinas, todos somos una única raza, la de los co-creadores,
hijos del Infinito.
La
Verdad total, absoluta, no puede ser captada por el ser humano, ella
nos rodea presente en todos los procesos vivos de la naturaleza y el
universo. A través de la experiencia de la vida ampliamos nuestra
percepción de las cosas y de nosotros mismos para niveles mayores de
objetividad.
En
cada reencarnación percibimos una parte de la verdad, una experiencia,
es un punto de vista que nos amplia nuestra percepción y nuestra
consciencia a un nivel más amplio. Cuando observamos mas puntos de vista
sobre la verdad, sobre una idea, sobre un fenómeno, sobre un objeto o
sobre nosotros mismos, vamos ampliando mas nuestra consciencia de la
realidad, del universo y de nosotros mismos.
Nos
acercamos aún mas, a la verdad total, cuantos más objetivos somos.
Cuantos mas puntos de vista integramos a nuestra experiencia, intuyendo
la esencia donde todo es una unidad.
Cuando
tomamos una idea, una parte del conocimiento, una experiencia como la
verdad absoluta, surgen los dogmas, los fanatismos, la ciencia teórica,
muestra una percepción parcial. Afirmar nuestra verdad como una realidad
absoluta y juzgar a los demás desde nuestra comprensión limitada y
unilateral, significa estar fuera de la realidad.
Los dogmatismos, los
fanatismos, las opiniones parciales, solo manifiestan un conocimiento
estático, muerto. Cuando somos capaces de observar a las personas, a las
ideas, a la experiencia, a los hechos desde todos los puntos de vista y
en vez de juzgar, comprendemos desde el corazón los porques; mas cerca
estamos de la verdad, de la Realidad universal.
La
Realidad no puede estar contenida en libros y letras, los libros y
letras son un modo de comunicar una realidad, pero la realidad es la
Vida, el Amor, eso debes experimentarlo con todo tu ser. Intuye, siente
las cualidades y la esencia de los seres, ábrete a que todo te muestre
su sabiduría.
Detrás de los fenómenos comprende las leyes universales y
detrás de las leyes, los seres espirituales que actúan, en la
naturaleza, en cada ser humano y en el Cosmos. Comprender lo que te une
en las partes al Todo e intuir la Esencia es percibir lo universal.
El
camino del Tercer Milenio, es la síntesis en lo universal, crear un
puente de interrelación y comunión entre todas las ciencias, filosofías y
religiones para comprender el todo, Dios, la vida, la evolución como
una unidad, como la Consciencia Planetaria.
Para
poder viajar a otros planetas, es necesario que toda nuestra humanidad
viva la ética del Amor universal. Amar a todos los seres humanos como a
nuestros hermanos. Amar a todas las crianzas como a nuestros hijos, amar
a todos los ancianos como a nuestros padres. Amar a todas las mujeres
con el amor devocional e impersonal, que nos impulsa a crear e irradiar,
un Amor universal a todas la humanidades del universo, transcendiendo
los padrones fisionómicos, culturales y religiosos terrestres y
sintiendo la belleza del corazón, sus valores, su vibración.
Todos los
seres vivos e inteligentes del universo, mas allá de su aspecto físico o
su planeta, son hijos del infinito, Dios.
En
el enamoramiento, la mayoría de las veces es el egoísmo a dos o apego
afectivo, lo que da satisfacción y seguridad. Si amamos auténticamente a
una persona, amamos a todas. En cada ser humano, hay algo bello,
maravilloso, que tenemos que descubrir, si somos capaces de transcender
la superficialidad, los intereses, y las apariencias, aprendiendo a
amarnos unos a los otros desde la paz del corazón y la flexibilidad,
ayudándonos a superar nuestros errores, en vez de aislarnos.
Esa
es nuestra evolución, tomar consciencia de responsabilidades como
padres, madres, amantes, maestros y aprendices de todos los seres
humanos. Solo en la humildad del corazón y en la responsabilidad
comunitaria, ampliaremos la luz de nuestro ser, dejando que se integre
nuestro ángel. Es la mística de la vida, un momento de amor reproduce la
luz con tanta intensidad, que precisarías miles de horas repitiendo
mantras u orando, para crear tanta luz.
La
vida es lo más sagrado, es la expresión del creador. El respeto
profundo a la naturaleza, a la evolución de las humanidades y a la
libertad de cada ser, son las bases que marcaran los intercambios con
otras humanidades del universo. En la ética del Amor, nos sintonizamos
con las leyes universales para participar como miembros activos en la
Fraternidad Blanca del Cosmos, la Confederación Intergaláctica.
Respetar el querer ajeno y amar la acción en sí misma, es el camino del hombre libre, el ser universal.
Antonio Cerdan
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